Fuck the distance.

Dicen que las palabras se las lleva el viento y por ello quiero dejar aquí mis palabras plasmadas y expresar así lo que siento por ti. Me encanta poder decir que te amo, y saber que lo nuestro es así de especial. Tendremos malas rachas que nunca querré recordar pero sé que la fuerza que nos une es capaz de superar cualquier cosa. Dime porque si nos amamos tanto nos quieren alejar, tanto hemos luchado por mantener nuestro amor y ahora míranos, alejadas una de la otra con una gran barrera que nos separa. Ambas sabíamos que esto seria algo tan difícil pero a pesar de  todo peleamos por este sentimiento.

Te prometí que lucharía siempre por seguir a tu lado y mírame, estoy sufriendo por seguir contigo nada en este mundo me haría tan feliz como el estar contigo sin que ninguna distancia se oponga a lo nuestro.
Como me ciega este odio contra los kilómetros que te alejan de mí, sé que has hecho todo lo posible por esta relación que nunca te rendirás, pero ¿cuándo estaremos tranquilas? ¿Cuándo mi vida? ¿Cuándo?
Cada noche rezo para que todo esto termine, que todo esté bien, en donde ya no existan distancias, donde seremos felices tu y yo. Sabes que siempre esperaré por ti, tal y como me lo prometiste tú, así será, tanto como dure mi vida.
A través de esa puerta de la que ya no hay regreso te estaré esperando con ganas de volver a estar a tu lado, esta vez para siempre.

El amor es.. una goma elástica.

Una persona, no muchos años menor que yo, que ya conoce todos mis líos amorosos, me preguntó que de que se trataba una relación, ¿cuando sabes que tienes pareja? ¿Es cuando pones una fecha? ¿Cuando das el primer beso? No, no puede ser algo tan simple, respondí, una relación es algo complejo, algo difícil de explicar, son muchas cosas conjuntas, y al mismo tiempo es nada, puedes dar besos sin que sea a tu pareja, puedes coger de la mano a alguien y no ser tu pareja, y puede que lleves años con tu pareja y no tengáis fecha, porque hay gente que no cree en los números. Pero ahora, lo pienso, si es simple, es más simple que nada, y lo descubrí mientras jugaba con una cinta elástica, la estiraba y la encogía una y otra vez y la solté sin querer de un lado, haciéndome daño en la mano que aun la sujetaba.Ésto me hizo pensar, las relaciones son como una cinta elástica, no tienen normas a seguir, pero si cumplen un patrón, en cada una de ellas hay dos personas, cada una sujetando un extremos de la cinta, hay veces, que todo es complicado y la cinta se tensa, tanto que piensas que puede llegar a romperse, y tienes la tentación de soltar, pues no sueltes, nunca sueltes, porque si lo haces, la otra persona, en el otro extremo sufrirá tanto como tu tenias miedo de sufrir.

Tú te elevabas mientras yo me hundía.

Joder, ¿alguien quiere explicarme porque cojones sigo recordando todas aquellas mentiras tan maravillosas? Prometiste que fueses donde fueses siempre regresarias aqui, a mi lado, sin embargo hace ya meses que te fuiste y no estás, y está bien, no solo lo elegiste tú, yo tambien, pero creo en el arrepentimiento, y en ante todo, creo en esos recuerdos que no me dejan dormir cada noche.
Es extraño cuando te encuentras mirando desde afuera, quiero estar ahí, en tu 
nueva realidad, pero no sé porque, dejé de creer en milagros. Pensé que eras mi 
cuento perfecto, mi sueño mientras estaba despierta, pero todos los demás sabían 
que me confundía y ahora tengo que fingir que no me importas. Ahora solo me queda la 
canción de aquella vez. Ya se que no eres un cuento de hadas, y aprendí que los sueños se hicieron para dormir. Que los deseos a una estrella no se hacen realidad. No puedo 
creer que estuviese tan ciega, tú te elevabas mientras yo iba cayendo..
sin embargo, volvería a colocarme la venda que dejé caer.

Sé que no te he perdido del todo.

Sé que esto no servira para absolutamente nada. Pero mi cuerpo me pide a gritos que te devuelva algo que te hice perder. No sé si lo echas de menos, o si te da igual, o si incluso igual lo agradeces. Aun cuando sigo en la incertidumbre esto es mejor que quedarme de brazos cruzados. Lo peor de todo es que no puedo darte lo que perdiste. No es que no quiera… o no deba. Es que no puedo. Es físicamente imposible. Leí una vez que lo mejor que puede regalarse es tiempo, porque cada segundo que pasa es único y no volverá a repetirse. Y cada segundo perdido es irrecuperable, lo que implica que si lo pierdes es para toda la vida. Lo malo de todo esto es que no quiero regalarte mucho de tiempo porque sería extraño. Me siento estúpida diciendo esto. Aun así me dejo influenciar por los demás y no quiero que piensen mal de mí o levantar habladurías. Te quiero. Te quiero muchísimo. No me casaré de repetirlo mientras lo sienta. Te echo de menos. No, no es que te eche de menos a ti, ni a tu presencia. No, mentira, a tu presencia sí que la echo de menos. Lo que pasa es que echo de menos que me quieras. Es como… pensar que tu cariño por mi se ha ido para siempre. Es triste, deprimente. 

¿Y si...?

Prometimos permanecer juntas siempre, es la promesa que hicimos, pero de repente nada es tan claro y estoy tirando en ambos sentidos.

Y rompo mi corazón en pequeñas partes, es imposible elegir.
¿Y si todo lo que he soñado está justo en frente de mí?
¿Y si pierdo? ¿Y si gano?
¿Cómo podría aprender a vivir preguntando ... "Y si..."?

Las cosas nunca volverán a ser igual, algo en nosotras, nuestras almas, se esperaran eternamente.
La respuesta está lo suficientemente cerca para que me toque
Pero, ¿Y si no vale la pena romper con nosotras?

Prometimos permanecer juntas siempre, es la promesa que hicimos, pero de repente nada es tan claro y no sé que decir.

¿Y si lo intento?

¿Y si lo hubiera intentado?

¿Podría brillar, incluso volar?
No quiero intentar hacerlo realidad después de que sea demasiado tarde.
Nunca lo voy a saber realmente...

Quiero decir ... ¿Y si...?

Amanecer.

Amanecer...
Sale el sol, pierde la vergüenza a que el dia lo vea, deja a un lado su timidez, y se roza sin vacilar con las colosales montañas que antes osaban esconderlo y tapar su inmensa belleza y brillo. Ahora yo quiero ser como ese sol, ese amanecer, dar a luz un nuevo pensamiento, o quizas sea el mismo de siempre, que ahora me atrevo a contar, dar a luz lo que siento, lo que no siento.
Ya no se trata de un eclipse, de una mentira, una falsedad más que tape lo que realmente quiero mostrar, ya no hay porque esconder nada más, no hay porque ser opaco, nitido, de hoy en adelante transparente.

Carta de amor.

Estoy aquí, en medio del frío, desafiando el insomnio que me provoca pensar en ti y he decidido escribir porque los sentimientos me asfixian y no me dejan vivir. Si, es para ti esta carta, no estás leyendo nada que no te pertenezca pues cada letra, cada signo y cada suspiro detrás de estos garabatos a los que llaman escritura, son todos tuyos. Tu, dueño y señor de mis sueños, eres un ladrón que me robó todo, hasta la valentía de firmar con mi nombre al final de esta carta.

Esta, sin embargo, no es una carta para decirte cuanto te amo con todas esas palabras pomposas y rebuscadas que podría yo escribir. Tampoco son letras que pudieran inspirar alguna novela o historia de amor de esas que a todos nos parecen cursi pero que en el fondo anhelamos vivir. Esta es solo una carta que te hablará de mi de la manera más simple y honesta que conozco.

Quien escribe no es una intelectual, ni una mujer de esas escogidas para la portada de alguna revista. Quien te escribe es tan solo una mujer común y corriente, con una vida ordinaria llena de altibajos, de alegrías momentáneas y de problemas, que pasa horas frente al ordenador

Detrás de estas letras hay un rostro que has visto muchas veces. Hay alguien que ves todos los días pero que nunca miras, que nunca observas. Alguien que quisiera decirte tantas cosas bellas y que tiene la garganta atada con un nudo que no permite que las palabras vuelen y se posen en tus oídos.

Esta no es una carta para decirte cuanto te amo, es una carta para que sepas que en alguna parte del universo un ser ríe y llora, vive y muere por ti, por tu cariño, por tu abrazo tibio, por el amor que un día desearía que fuera mio.

No quiero ser como cenicienta.

Cuando era solo una niña, mi madre me leía en la cama cuentos de princesas en apuros. Y me contaba como príncipes las salvaban. Me quedaba en la cama, 
pensando en que persona quería ser. Y un dia me di cuenta que la vida en un 
cuento de hadas no era para mi. No quiero ser como cenicienta, estar en 
una oscurafría y polvorienta bodega, esperando a que alguien me salve. 
Y no quiero esperar a un príncipe apuesto. No quiero que me rescanten, 
quiero rescatarme a mi misma.Puedo matar yo misma mi propio dragón y 
puedo soñar que sostengo una brillante armadura.

No dejes que se acabe.

• Dos voces perfectamente mezcladas desde el principio, tengo miedo que sea el fin, y mi mundo se venga abajo. Se acabó, y me siento tan sola, es una tristeza que nunca había conocido ¿Como deje que el sueño mas dulce  acabara? y tengo miedo que el dolor este aquí para quedarse.Promesas hechas hace mucho tiempo, no significa que deban  romperse. Muchas palabras quedaron sin decirse, dime como se suponía que debía ser.Doy vueltas y vueltas y vueltas en mi cabeza queriendo traer de vuelta todo. Nadie es perfecto, todos cometemos errores Estoy lista para hacer lo que sea por favor, no dejes que se acabe.

Girate, estoy aqui, mirandote.

• Girate, girate y fija tus ojos en mi dirección, así conectaremos.No puedo hablar, no puedo hacer un sonido para, de alguna manera, captar tu atención. Miro fijamente la perfección.Me llamas desconocida,Pero esos pensamientos te abandonaran esa noche.Estoy segura, pero no puedo fingir que no me aterroriza encontrarme contigo. Sabia que podias ver a través de mi y vi pasar mi vida como un flash delante de mis ojos, y sabia exactamente en lo que nos convertiríamos.Tu belleza me parece tan lejana... tendría que escribir mil tablones para hacerte comprender lo hermoso que eres.Se que no puedo hacer que te quedes pero daria hasta mi ultimo aliento por ello.Me llamas desconocida...

Miedo.

• Él tiene miedo , ya actuó una vez, puso las cartas sobre la mesa, barajandolas anteriormente a su antojo y perdió la apuesta, tiro los dados, trucandandolos previamente para salir par, y el resultado fueron tantos impares como él tuvo resistencia para seguir viendolos salir. Perdió todo lo que tenía, y no contento con ello repitió ese error barias veces. Ahora su madurez a dado un paso adelante, se niega a seguir perdiendo, a actuar y fallar, por lo que se implanta una nueva filosofía "no actuar" que actúen otros, yo respondo. Y así el margen de error se reduce a cero, no gano, no pierdo, conservo lo que ahora tengo, que no es poco.